Los nipones se perfilan como uno de los seleccionados más dudosos de la Copa. Con un brusco viraje en la conducción técnica y táctica a pocos meses del certamen, ha tenido partidos de preparación que aumentaron las incertidumbres en lugar de despejarlas. Akira Nishino reemplazo al bosnio Vahid Halilhodzic en abril y el cambio ha sido radical en todos los aspectos. Con Nishino, Japón regresó a un conservadurismo conceptual que no ha tenido buenos síntomas en su primeras presentaciones.
Japón tuvo una campaña casi perfecta en la Clasificación Asiática con un estilo de juego definido. Incluso, junto a Arabia Saudí, devolvieron a Australia nuevamente a los repechajes y así volvió a consagrarse como exponente del continente. Pero todo cambió en 2018 para Japón: una dura derrota ante Corea del Sur en noviembre pasado indicó el camino del estratega europeo y un empate ante Mali y perder frente a Ucrania en la fecha FIFA de marzo, sentenció su suerte en el puesto. La base, con Kawashima, Nagatomo, Yoshida, Hasebe, Kagawa, Honda y Okazaki se
mantuvo, aunque hay ausencias como Shoya Nakajima, Minamino o Kiyotake que le hubieran dado un vuelco más ofensivo al cuadro.
Teniendo en cuenta estos factores, los asiáticos dan su referencia como el rival más accesible para sus contrincantes en el grupo. Su debut ante Colombia será una muestra de tal confirmación o de tal equivocación.
Arqueros: Eiji Kawashima (FC Metz, FRA), Masaaki Higashiguchi (Gamba Osaka) y Kosuke Nakamura (Kashima Antlers)
Nishino aun no define su once ideal y los movimientos tácticos de Makoto Hasebe, un referente del equipo, lo demuestra. El entrenador lo ha ubica como líbero, como mediocentro en soledad y como doble pivote, teniendo más cuerpo e identidad esta última posición. Nishino busca dar amplitud a laterales y extremos; y por ello ha implementado línea de 3/5 aunque sin conseguir un buen funcionamiento. Por eso, el 4-2-3-1 se antoja como el módulo más consistente.
La figura: Makoto Hasebe (34 años)
El mediocampista es el verdadero pilar de la Selección. Más allá del talento diferencial que puedan otorgar Honda, Kagawa o Inui, el firme bastión es Hasebe. Con su liderazgo y veteranía aporta equilibrio, ubicación, despliegue y serenidad a una medular descompuesta en los últimos partidos. Desde su olfato marcador y su sentido de la entrega, podrían nacer los mejores matices de Japón.
Punto a favor: Nómina exprimentada
Punto negativo: El manojo de incertidumbres
Partidos: Colombia (19/6); Senegal (24/6); Polonia (28/6)
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| Foto: Getty Images |
Teniendo en cuenta estos factores, los asiáticos dan su referencia como el rival más accesible para sus contrincantes en el grupo. Su debut ante Colombia será una muestra de tal confirmación o de tal equivocación.
Los 23
Arqueros: Eiji Kawashima (FC Metz, FRA), Masaaki Higashiguchi (Gamba Osaka) y Kosuke Nakamura (Kashima Antlers)
Defensas: Yuto Nagatomo (Galatasaray, TUR), Tomoaki Makino
(Urawa Reds), Maya Yoshida (Southampton, ING), Hiroki Sakai (Olympique Marsella,
FRA), Gotoku Sakai (Hamburgo, ALE), Gen Shoji (Kashima Antlers), Wataru Endo
(Urawa Reds), Naomichi Ueda (Kashima Antlers)
Volantes: Makoto Hasebe (Eintracht Frankfurt, ALE), Keisuke
Honda (Pachuca, MÉX), Takashi Inui (Eibar, ES), Hotaru Yamaguchi (Cerezo
Osaka), Shinji Kagawa (Borussia Dortmund, ALE), Genki Haraguchi (Fortuna
Düsseldorf, ALE), Takashi Usami (Fortuna Düsseldorf, ALE), Gaku Shibasaki
(Getafe, ESP), Ryota Ohshima (Kawasaki Frontale)
Delanteros: Shinji Okazaki (Leicester City, ING), Yuya Osako
(Werder Bremen, ALE), Yoshinori Muto (Mainz, ALE)
Nishino aun no define su once ideal y los movimientos tácticos de Makoto Hasebe, un referente del equipo, lo demuestra. El entrenador lo ha ubica como líbero, como mediocentro en soledad y como doble pivote, teniendo más cuerpo e identidad esta última posición. Nishino busca dar amplitud a laterales y extremos; y por ello ha implementado línea de 3/5 aunque sin conseguir un buen funcionamiento. Por eso, el 4-2-3-1 se antoja como el módulo más consistente.
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| El XI probable de Japón |
La figura: Makoto Hasebe (34 años)
El mediocampista es el verdadero pilar de la Selección. Más allá del talento diferencial que puedan otorgar Honda, Kagawa o Inui, el firme bastión es Hasebe. Con su liderazgo y veteranía aporta equilibrio, ubicación, despliegue y serenidad a una medular descompuesta en los últimos partidos. Desde su olfato marcador y su sentido de la entrega, podrían nacer los mejores matices de Japón.
Punto a favor: Nómina exprimentada
Punto negativo: El manojo de incertidumbres
Partidos: Colombia (19/6); Senegal (24/6); Polonia (28/6)
Japón
Reviewed by laprimeragambeta
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11:48
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