El último Chelsea antes de Abramóvich

En junio de 2003 la historia de la institución londinense tendría un quiebre con la llegada del ruso Roman Abramóvich. Anteriormente, el italiano Claudio Ranieri había conformado un buen equipo sin las figuras rutilantes que llegarían con José Mourinho.

El danés Gronkjaer celebra
Foto: Chelsea FC

Eran tiempos de últimos cartuchos para varios talentos noventosos. Ed de Goey, Marcel Desailly, Graeme Le Saux, Emmanuel Petit y Gianfranco Zola hacían los movimientos finales en sus carreras y los cambios se avecinaban, aunque no se pensaba que serían tan radicales. Ranieri culminó cuarto en la Premier 2002/03, previa a la asunción del ruso y en la siguiente temporada, cuando Abramóvich adquirió Chelsea, el equipo fue segundo y cayó en semifinales de Champions League aún con el italiano en el banquillo.

La nómina de Ranieri pretendía mezclar veteranos y jóvenes ya con recorrido. De Goey tuvo que dejar su lugar a un ágil Carlo Cudicini, Desailly y William Gallas se apoderaron de la zaga, mientras que Mario Melchiot sostuvo el lateral derecho y en la franja izquierda se alternaban el nigeriano Babayaro y Le Saux. Chelsea, además había comprado a un adolescente Robert Huth y a Valerio Di Cesare por recomendación del estratega y John Terry hacía sus primeras armas.

Petit, el croata Mario Stanic y Frank Lampard lideraban el círculo central y en los extremos Boudewjin Zenden y Jesper Gronjkaer, de gran campaña en Ajax y en el Mundial 2002 con Dinamarca, desnivelaban para nutrir a Jimmy Floyd Hasselbaink, centrodelantero de moda en la época. Además, dos fichajes para esa temporada fueron Gabriele Ambrosetti y Enrique De Lucas, que no lograron consolidarse en el club y rápidamente se marcharon.

Cuando Roman Abramóvich llegó a la institución trajo una docena de futbolistas de magnitud mundial. Wayne Bridge y Glen Johnson, laterales de proyección en Selección, los intrépidos punteros Damien Duff y Joe Cole, y adquirió a Makelele y Geremi para una cobertura defensiva eficiente en el círculo central. Finalmente, también realizó compras multimillonarias que no cumplieron las expectativas en Chelsea: Juan Sebastián Verón, Hernán Crespo y Adrian Mutu. Figuras en el Calcio, el tridente apenas estuvo un año en Londres.

Sin embargo, de aquel conjunto previo a la llegada del empresario y a la colocación de Mourinho en junio de 2004, apenas sobrevivieron Carlo Cudiccini, John Terry, Gallas, Lampard y Eidur Gudjohnsen. Con el portugués arribarían Drogba, Cech, Carvalho, Ferreira, Robben, Mateja Kezman y otros tantos que terminaron de confeccionar la premisa netamente mercantil de los Blues, impronta buscada por Abramóvich, que a su vez fue acompañada con títulos.