Cristiano Ronaldo: Implacable a los 34

Cristiano Ronaldo condujo a Portugal a la gran final de la UEFA Nations League tras destaparse con un hattick ante Suiza la semi. La polémica la trajo nuevamente el VAR.

Foto: UEFA Nations League - Twitter

En Porto se registró una nueva exhibición de Cristiano Ronaldo ante el mundo. El 7 se despachó con una fenomenal tripleta para derrotar a Suiza y clasificar a su Selección a la finalísima de la UEFA Nations League, el nuevo certamen del ente que rige al fútbol europeo. Ronaldo volvió a deslumbrar con goles típicos de su factura: un tiro libre con su efecto que pocos arqueros han podido descifrar, una arremetida al gol y un acto individual, bicicleta incluida, con un remate certero. Como lo conocimos, lo vemos. A los 18 como a los 34. Siempre implacable.

En el desarrollo del cotejo Suiza se mostró firme en el campo. Con la identidad que caracteriza al combinado dirigido por Vladimir Petkovic puso contra las cuerdas a Portugal. Desde la posesión, la posición y la pizarra, los helvéticos lucieron mejor; pero no pudieron contener a un Cristiano con los ángeles sueltos y, ante eso, a veces hay poco dibujo o herencia táctica-futbolística que pueda detenerlos. Un hecho muy particular se dio en el segundo tiempo sobre el minuto 56: Zuber fue derribado en el área por Semedo, pero el juez alemán Brych no sancionó penal. En el contraataque, se dio un penal clarísimo a Bernardo Silva que el teutón sí convalidó. Sin embargo, VAR mediante, fueron tres minutos desconcertantes de espera donde se decidió retrotraer la acción de Zuber y sancionar la infracción en favor de Suiza. Una vez más la exposición de los árbitros, otra vez más el juicio hacia el VAR y su desnaturalización del juego. ¿Lo justo? Fue lo que se resolvió y Suiza empató el partido.

Volviendo al juego, Fernando Santos está diagramando una Portugal con nuevos matices. Un nuevo jugador por línea se destaca en su esquema: Ruben Dias, Ruben Neves y Joao Felix. El DT campeón de Europa utilizó un esquema posicional naciente del 4-3-1-2 en rombo con Bernardo Silva de enlace entre Ronaldo y el niño maravilla Félix. Detrás fue sostenido por Bruno Fernandes y William Carvalho como interiores y por Neves en el eje. Sin embargo, por naturaleza Bruno y Bernarndo fueron permutando de parcela para buscar desajustar el esquema rival. Ambos tienen dotes para la conducción y una finura elegante para dar el pase final. Lo mismo Cristiano y Joao Félix: por momentos uno se inclinaba hacia una punta y el otro quedaba como referencia de área. Desde el 4-3-1-2 se desprendieron otros módulos como el 4-3-3 mencionado o el 4-2-2-2 ya con William Carvalho más asentado en un doble pivote con Ruben Neves.

Permutas posicionales Bernardo-Bruno

El 4-3-1-2 inicial

Momentos del 4-3-3

¿Por qué sufrió Portugal?

En buena parte del partido, Santos no pudo resolver la disposición del rival. Petkovic asumió un 3-5-1-1 en el papel, pero los dibujo híbridos entregaron variantes espectaculares para imponerse en la cancha. Suiza se mostró superior por la sincronización a la hora de ejecutar esos híbridos. Mbabu fue extremo y lateral al tiempo; Zuber hizo un recorrido similar aunque con más apoyo de Ricardo Rodríguez y estatus de lateral izquierdo natural. Si Mbabu quedaba a mitad de camino, Denis Zakaria se desplazaba al lateral. Justamente Zakaria es una especie de comodín para Petkovic. Clave en el trivote, determinante en el movimiento. Se perfila como un 'box to box' ideal para la idea del entrenador. A su vez, Shaqiri como elemento de desequilibrio en todo el frente de ataque. La orquesta, como es habitual,dirigida por fenomenal Granit Xhaka. ¿Donde estuvo la falla de Suiza? Esta vez (pocas veces ha sucedido) en Sommer. El portero no entregó garantías durante el cotejo y tuvo responsabilidad, sin quitar méritos a Ronaldo, del traspié de su equipo.