El central más barato del mundo

Virgil Van Dijk le explica al mundo los errores más románticos del mercado: pagaron 83 millones de euros por él y eso es un detalle módico: el holandés vale más en la cancha que en las finanzas.

Había escrito que en “El Placer de la Presión Alta”, Liverpool tenía dos referentes de seguridad máxima para su realización. “En la cueva, Van Dijk. En la portería, Alisson. Los dos fichajes mega estelares de Jürgen Klopp en el mercado de verano son los que sostienen esa idea”. En Alemania, ante Bayern, por los octavos de final de la Champions League, Virgil Van Dijk volvió a demostrar que resultó ser el defensor central más barato del mundo.

Cuando Klopp pagó más de 80 kilos por el holandés del Southampton, muchos quedaron atónitos, sorprendidos por semejante monto; pero Jürgen, tan hábil como perspicaz, no yerra. Alisson expresa partido tras partido que sus guantes valen ese dineral y Virgil Van Dijk, es, en estos momentos, el mejor zaguero del planeta. Su coste, termina siendo un vuelto con respecto a su rendimiento desde que se puso la camiseta ‘red’ a comienzos de 2018.

Antes de coronar la victoria de Liverpool en el Allianz Arena, Van Dijk se deglutió a Robert Lewandowski, uno de los delanteros más temidos, como si nada. Un portento físico inigualable, una concentración que asusta y una férrea disciplina para el marcaje que deja tranquilos cualquier nervio. Esa voracidad para el quite, esa serenidad para el salto, esa templanza de su liderazgo lleva a Liverpool a soñar, porque en las noches decisivas, Virgil estuvo allí cumpliendo con honores. En el área propia y en la rival. Lo mejor es que todavía quedan partidos en este curso para seguir escribiendo una historia inconmensurable.