Claudio Ranieri será el entrenador de Nantes en la próxima temporada y junto a Marcelo Bielsa matizará aún más el campeonato francés. Las perspectivas tácticas y estratégicas del entrante certamen ilusionan.
La venidera Ligue 1 será estupenda. Al intento de ratificación de Mónaco, a lo que querrá recuperar el PSG, a las búsquedas de reivindicación de Lyon y Marsella y a la consolidación de Niza, se suman dos proyectos de magnitud: el Lille de Bielsa y el Nantes de Claudio Ranieri. Las miradas estarán en los banquillos: Jardim ha ganado un alto handicap con Mónaco, Emery está sofocado y aunque PSG demanda Champions, no resistirá perder otra Liga; Rudi García tiene la obligación de devolver el prestigio a Olympique, el admirable Lucien Favre querrá consolidar su proyecto en Niza y Bruno Génésio, de intensa campaña en Europa League, buscará que Lyon regrese al pedestal en Francia.
Bielsa: El método Bielsa es de público conocimiento y sus sistemas tácticos no variarán de acuerdo a los nombres, sino que los hombres deberán asimilar el férreo concepto estratégico del rosarino. Aunque en sus ideas Bielsa deseará encontrar un equipo que se moldee a sus nítidas exigencias modulares, se prevee que su convicción esté abierta a diferentes abanicos. Seguramente veremos alternaciones entre una línea de tres hacia la línea de cuatro o cinco, donde se reflejará su impronta en la evolución de sistemas que busca quitar defensores y delanteros para sumar a la línea de volantes. La dinámica en el juego es esencia para el Loco y la belleza del vértigo será un factor imprescindible en sus oncenos.
Ranieri: El italiano no renunciará a una zaga corpulenta y fuerte en el juego aéreo, a la salida de los laterales para la colaboración con los extremos (Dubois y Lucas se adaptan) y a la presencia de dos volantes centrales (Guillaume Gillet imprescindible) que sirvan de tapones y tengan buenos desplazamientos hacia los costados. Nantes será un desafío similar a Leicester.
Jardim: Habrá que ver sobre el final del mercado cuánto desmantelaron a su exitoso equipo y cómo suplirá las bajas. Ya se ha marchado Bernardo Silva, una usina de fútbol para Jardim y Mbappé es de las joyas más cotizadas. Además, a Bakayoko, Lemar, Mendy y Sidibé no le faltan pretendientes y el ojo del entrenador para suplir las criaturas que creó será trascendental. Las diversas figuras que se desprendan de la raíz madre del 4-2-3-1, será un reto para el portugués.
Emery: Su inamovible 4-3-3 necesita más despliegue desde los laterales. Hay cartera para moverse en la ventana de transferencias y el mediocampo posiblemente también será transfigurado. También hay apuros y en caso de no obtener los resultados requeridos y que su equipo no guste, su cabeza sería la primera que ruede.
García: Marsella necesita reforzarse y el ADN de Rudi requiere de horizontalidad y polifuncionalidad. Al DT le dolerá si Thauvin es moneda de cambio y Payet no recupera su altísimo nivel alcanzado en Premier. Ante Mónaco fue goleado en ambos duelos y García tendrá que tomar nota de su desproporción defensiva con respecto al ataque.
Favre: El suizo desestimó una jugosa oferta de Borussia Dortmund y seguirá en Niza. Su ajedrecista plan entusiasta y audaz se rodea de jóvenes talentos a explotar en la élite mundial y se hermana con la filosofía "bielsista" en la línea de tres defensores y en la nutrición de la zona medular. ¿Quién no quiere ver un Niza-Lille?
Génésio: Lyon perdió mucho en la anterior Ligue 1 y Bruno Génésio tendrá que bosquejar una nueva teoría para mejorar esta temporada (buena siendo 4º y semifinalista de Europa). La marcha de Valbuena y las inminentes salidas de Tolisso y Lacazette harán pensar al estratega en el sostenimiento del 4-2-3-1 si no elige los futbolistas adecuados para reemplazarlos.
Otros rasgos a tener en cuenta:
Christian Gourcuff buscará llevar a Rennes nuevamente a Europa. El veterano estratega dirigió una década a Lorient y conocedor de punta a punta de la liga doméstica. Además, Chistophe Galtier pretenderá el salto de calidad de Saint Ettiene, Jocelyn Gouvernecc deberá recuperar la confianza de Bordeaux y Pascal Dupraz tiene la meta de levantar a Toulouse.
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| Bielsa, en su presentación en Lille Foto: As - España |
La venidera Ligue 1 será estupenda. Al intento de ratificación de Mónaco, a lo que querrá recuperar el PSG, a las búsquedas de reivindicación de Lyon y Marsella y a la consolidación de Niza, se suman dos proyectos de magnitud: el Lille de Bielsa y el Nantes de Claudio Ranieri. Las miradas estarán en los banquillos: Jardim ha ganado un alto handicap con Mónaco, Emery está sofocado y aunque PSG demanda Champions, no resistirá perder otra Liga; Rudi García tiene la obligación de devolver el prestigio a Olympique, el admirable Lucien Favre querrá consolidar su proyecto en Niza y Bruno Génésio, de intensa campaña en Europa League, buscará que Lyon regrese al pedestal en Francia.
Bielsa: El método Bielsa es de público conocimiento y sus sistemas tácticos no variarán de acuerdo a los nombres, sino que los hombres deberán asimilar el férreo concepto estratégico del rosarino. Aunque en sus ideas Bielsa deseará encontrar un equipo que se moldee a sus nítidas exigencias modulares, se prevee que su convicción esté abierta a diferentes abanicos. Seguramente veremos alternaciones entre una línea de tres hacia la línea de cuatro o cinco, donde se reflejará su impronta en la evolución de sistemas que busca quitar defensores y delanteros para sumar a la línea de volantes. La dinámica en el juego es esencia para el Loco y la belleza del vértigo será un factor imprescindible en sus oncenos.
Lee también: Bielsa anda diciendo
Ranieri: El italiano no renunciará a una zaga corpulenta y fuerte en el juego aéreo, a la salida de los laterales para la colaboración con los extremos (Dubois y Lucas se adaptan) y a la presencia de dos volantes centrales (Guillaume Gillet imprescindible) que sirvan de tapones y tengan buenos desplazamientos hacia los costados. Nantes será un desafío similar a Leicester.
Jardim: Habrá que ver sobre el final del mercado cuánto desmantelaron a su exitoso equipo y cómo suplirá las bajas. Ya se ha marchado Bernardo Silva, una usina de fútbol para Jardim y Mbappé es de las joyas más cotizadas. Además, a Bakayoko, Lemar, Mendy y Sidibé no le faltan pretendientes y el ojo del entrenador para suplir las criaturas que creó será trascendental. Las diversas figuras que se desprendan de la raíz madre del 4-2-3-1, será un reto para el portugués.
Emery: Su inamovible 4-3-3 necesita más despliegue desde los laterales. Hay cartera para moverse en la ventana de transferencias y el mediocampo posiblemente también será transfigurado. También hay apuros y en caso de no obtener los resultados requeridos y que su equipo no guste, su cabeza sería la primera que ruede.
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| El urgido Emery |
García: Marsella necesita reforzarse y el ADN de Rudi requiere de horizontalidad y polifuncionalidad. Al DT le dolerá si Thauvin es moneda de cambio y Payet no recupera su altísimo nivel alcanzado en Premier. Ante Mónaco fue goleado en ambos duelos y García tendrá que tomar nota de su desproporción defensiva con respecto al ataque.
Favre: El suizo desestimó una jugosa oferta de Borussia Dortmund y seguirá en Niza. Su ajedrecista plan entusiasta y audaz se rodea de jóvenes talentos a explotar en la élite mundial y se hermana con la filosofía "bielsista" en la línea de tres defensores y en la nutrición de la zona medular. ¿Quién no quiere ver un Niza-Lille?
Génésio: Lyon perdió mucho en la anterior Ligue 1 y Bruno Génésio tendrá que bosquejar una nueva teoría para mejorar esta temporada (buena siendo 4º y semifinalista de Europa). La marcha de Valbuena y las inminentes salidas de Tolisso y Lacazette harán pensar al estratega en el sostenimiento del 4-2-3-1 si no elige los futbolistas adecuados para reemplazarlos.
Otros rasgos a tener en cuenta:
Christian Gourcuff buscará llevar a Rennes nuevamente a Europa. El veterano estratega dirigió una década a Lorient y conocedor de punta a punta de la liga doméstica. Además, Chistophe Galtier pretenderá el salto de calidad de Saint Ettiene, Jocelyn Gouvernecc deberá recuperar la confianza de Bordeaux y Pascal Dupraz tiene la meta de levantar a Toulouse.
Las batallas tácticas de la próxima Ligue 1
Reviewed by laprimeragambeta
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11:31
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